Tuesday, November 08, 2005

Sábado, 5 de Noviembre.

Un fuerte rayo de sol intemperante contra mi cara se encargó de hacerme notar que aún estaba vivo en este mundo. Me acordé de las boletas que mi amiga Anna había prometido para el estreno de 2046. Lo primero que hice fue buscar infructuosamente su número de celular por todos lados. Entré a MSN con la esperanza remota de encontrarla. Nunca llegó. Me reprendí por bruto. Linda Lee también se levantó. Revisó su correo y en MSN un chico la invitaba a la misma premier. Me di cuenta que el trabajo que tú no haces lo pueden hacer los otros y tendí a amargarme un rato pero Kira pareció comprenderme y me hizo prometerle que apenas la estrenaran a nivel nacional tenía que llevarla. La insté a bañarse mientrás intentaba preparar una columna para la clase de la mañana. Mi madre hablaba por télefono, mi padre tras mi espalda para utilizar el computador, el reloj corriendo como loco. Finalmente no pude hacer ni mierda, me alisté con ligereza, preparé la cámara de video y salí a la calle con Linda. Demasiado tarde era ahora, tomamos un taxi que nos llevó en 20 minutos hasta el centro. Me despedí en la entrada del <> de Linda Lee y salí corriendo a clase. El cucho marica no había llegado y yo estaba con la tristeza a flor de piel. No saludé a nadie al llegar y me hice al rincón. Lo que más me duele de la operación que me hice en los ojos es saberme incapaz de soltar lágrimas. Así que me ayudé con las gotas y de ese modo me sentí un poco mejor. Sonaba música electrónica de los lejanos años 2002. Cuando volví la cara pude ver a Juliana, Rodrigo, Ciro y otras chicas. Rodrigo me dijo algo que no pude escuchar y le saludé con la mano. Luego recapacité, fui hasta donde ellos estaban, los saludé bien y les pregunté sobre sus vidas. Empezó la clase. Hubo un momento en que me quedé dormido sobre el ejercicio de redacción que nos puso el cucho. Él se acercó silenciosamente, me tomó del hombro y me dijo: qué pasa. Hice cara de estúpido y lo ignoré. Al terminar de clase salimos al encuentro del novio de Paola con Paola. Paola sólo hablaba del video, estaba demasiado entusiasmada y ya me la imaginaba con una profunda decepción en la tarde. Fuimos hasta el armario, Paola pidió un almuerzo con carne y yo una bandeja paisa. El novio de Paola, Oscar, al rato se antojó de la bandeja y pidió una para él. En esos instantes llamó José Luis a Paola y le dijo que paila, que no podía grabar hoy. La cara de Paola se transformó en un gesto de dolor muy áspero. Seguimos hasta la casa de la topo, dormí al ritmo de Rammstein durante el trayecto. Nos bajamos en un feo potrero por la 153. .. Eran ya casi las 3, al rato llegó Alejandro y nos concentramos en analizar la locación. Nos dimos cuenta que el baño de la casa de topo no servía y nos amargamos un rato. Mientrás tanto, yo me alistaba para mi papel en el video: el papel de una travesti maricona. Fui al cuarto de topo y ella me mostró unas blusas, de la cual la que más me gustó fue una verde fluorescente. Me pasó unas medias ajustadas de rayas, a la usanza punk. También una corta falda que me hacía sentir demasiado secsy discos. Luego, una balaca. Salí a desfilarle a los chicos y me miraban con cara de horror, asco y satisfacción de que resultara tan grotesco como el papel lo exigía. Los chistes sobre mi sexo empezaron a fluir, sin molestarme demasiado realmente. Ni siquiera tengo un sexo para defender: soy un asexual confeso. Empezamos a ver que todo estaba saliendo realmente mal, pensamos en unas locaciones más adecuadas en el centro y antes de que las cosas se pusieran mucho más densas sugerí que fueramos yendo al centro. Se fueron Alejandro, Paola y Oscar. Quedé a esperar a Danny con la topo y la otra amiga. Les hablé un rato a las chicas sobre mi vida y ellas sobre sus vidas. Pensé que hacer un video porno en ese instante sería algo muy guarro y vomitivo. Al rato llamó Paola, se habían varado. Salimos a llamar a Danny, pero en la entrada lo encontramos. Así que llamamos a Paola diciéndole que ya ibamos para allá con él. Nos devolvimos al apartamento de topo, alistamos las cosas y salimos al rescate de nuestros desafortunados compañeros. Los recogimos, todos con cara de horror y realmente a mí no es que me importara mucho todo el espectáculo que se estaba empezando a generar. Estaba demasiado tránquilo. Al llegar al centro fuimos a donde don Tito, le comentamos la idea y no puso problema para la grabación ya que Paola y Oscar son sus clientes favoritos. El baño estaba perfecto. Salí con topo a comprar una pistola y algo para hacer sangre. Al llegar me cambié y quedé muy linda. Topo me maquilló. Ahora era el centro de atracción en el cuchitril de don tito. Las chicas no paraban de reír viéndome vestido como toda una travesti punk. La gente que pasaba se quedaba a mirarme perpleja. Había un borracho que me coqueteaba y yo me sentía codiciada y sexy de una manera baja, repulsiva. Estuvimos grabando hasta que nos dieron las 9 y nos sacaron finalmente del sitio. LLamé a Kira para que me cayera pero no llegaba. Así que salimos tras el encuentro de ella en la 19. La encontramos pasando la calle y yo me bajé del carro de Danny, corriendo y gritando: Kiraaa.. con la pistola en la mano, un bus casi me arrasa. La convide a la fiesta en casa de topo y dijo que realmente no estaba en un muy buen mood. La entendí, le di un beso, estaba muy bonita y me fui. Adentro en el carro de Danny nos reíamos y ellos me hacían saber lo graciosa que fue la situación de verme bajando, aún con colorete en los labios, casi arrollado, con la pistola en la mano, gritando y corriendo por toda la 19 con séptima. Me decían que diera gracias a Dios que no habían agentes en ese momento, pues de verme, corriendo con una pistola en todo el centro, de una vez me hubieran agarrado a bala. Reía mucho y me mostraba muy amable con el grupo que iba. Al llegar a casa de topo ella me ofreció un café el cual quise tomar con toda la disposición pero noté con horror que estaba lleno de motas. Y no sé de dónde diablos puede haber mota en un café. Lo tomé forzadamente, conteniendo el vómito. Estuve un rato conversando con ellos, hablando sobre el significado de los besos, del amor. Finalmente el sueño terminó venciéndome y le pedí a topo una cama donde dormir. Sonaba Alpha en mis auriculares.

1 comment:

Anonymous said...

Amigo Luis: Me encanta tu diario! Me parece hilarante. En la próxima que te consiga las boletas te prometo que te las daré.