Thursday, November 03, 2005

Miércoles, 2 de Noviembre.


Gasté dos horas tratando de organizar un día demasiado agitado en la interzone y el hijueputa blogger no lo bajó. Mala suerte digital supongo o corrección inflexible del sistema a texts demasiado largos con poco contenido reflexivo (menthal diarrhea). En resumidas cuentas, el día miércoles fue uno de aquellos días agitados, supremamente carnales, sin poca retribución espiritual y mucho desgaste tanto físico como moral. Sobre la fiesta en chachaclub, estuvo muy bien hasta que empezó esa perrata banda mezclacintas, cuyo cantante más parecía salido de un balneario tolimense que de la escena propia new wave. El punto del colmo fue cuando tocaron un asqueroso bizarre love triangle y remataron cagándose en la memoria del pobre Curtis haciendo un pésimo cover de Love Will tear us apart. Ahora el cantante no se definía si por un falsete apestoso o por el tono de voz de Curtis, con lo que resultó una pésima parodia desafortunada que terminó amargandome profundamente el rato. El resto de canciones seguían un mismo esquema aburrido de golpes secos de una bateria insípida, un bajo fuerte y monótono, una guitarra distorsionada sin mucha presencia y la voz como si hubiera pasado por un terrible proceso tecnológico que la hiciera sonar como las ardillitas Chip & Dale. No sé qué putas piensan estos chicos qué es el new wave. Tal vez creen que es un mismo esquema básico de composición, pero se olvidan de pretensiones más profundas tanto en sonido como en líricas que encuentras en las canciones de Joy Division, Bauhaus, Dead Can Dance, Velvet Underground. Estas pretenciones, la verdadera razón de ser y pertinencia del new wave en la historia del rock, sencillamente no llegaron a estos lares. Como toda clase de géneros a esta provincia de mierda sólo llega la pose, el esquema básico, la mera forma rídicula de posar la jeta y menear las caderas... y quien quiere llegar más lejos, se refugia en las drogas de sus ídolos sin jamás llegar a compartir un chispazo realmente genuino que lo haga parte de aquel gran movimiento al cual quiere pertenecer. Me amargué pero a la vez estaba como en un sueño 41 pisos arriba del frío suelo capitalino con Madame Tristesse, el verdadero ser del día Miércoles, la alegria y la agitación de compartir con ella estos ratos de confrontación con la estúpidez universal. La vista del sitio era preciosa pero el ambiente estaba pesado por culpa de los gorilas vulgares de seguridad y uno que otro sapo de gafas. Me alegró haber estado ese día con Kira. Escuchar Crystal de New Order mientrás nos ahogabamos en el desolador frío de chapinero a la entrada del sitio. Otro rato en cualquier tienda de la esquina abrazándonos con la melancolía de la voz de Nat King Cole cantando boleros en español. Un buen día... pero los días tranquilos hace mucho que dejaron de pertenecer a mí.

La melancolía es tan dulce... Tantas cosas en mi mente, no dejan cerrar mis ojos. He soñado tanto despierto, que para qué dormir.

8 comments:

Anonymous said...

uy aca es donde nos la damos de Serios mi querid/a Amigo?

interesante muy. por aca vendre a Joderle la Vida, como no.

Kozure

wintermute said...

Das amerikanem, das Judem...

Addiction Kerberos said...

Cómo hace para mantener callado un judio?

wintermute said...

Creo que hablando de Auchwitz...

El Atizador said...

Buena pelea...

Anonymous said...

No. Si hablamos de Holocausto menos nos callamos. Os sugiero ue hablen mas bien de Otras cosas, de cerdos, por ejemplo.

Kozure

Unknown said...

tantas cosas en mi mente..., que cancion es y quien la canta, la necesito ???¡¡¡

Anonymous said...

Estados Alterados